«Ser alcalde del bicentenario es un honor para mí y para mi familia»
Entrevista a Juan Carlos Arango, alcalde de la Municipalidad Provincial de Huamanga.
¿Qué se siente ser el alcalde en una fecha trascendental como es el Bicentenario de la Batalla de Ayacucho?
Es una gran responsabilidad asumir en este contexto histórico del Bicentenario. Estamos en una línea de atención a todo lo que sucede en nuestra ciudad. Por eso, en la prestación de servicios involucramos a las unidades orgánicas y trascendemos a nivel de la gestión. En la ejecución del presupuesto público hemos roto esquemas. En este segundo año hemos superado incluso el 75% y el año pasado llegamos a 84% de ejecución física y financiera, sin devengar algunas compras últimas que lo hemos pasado por un proceso regular y ya lo hicimos en enero.
Tú, como persona, ¿Qué sientes de esta responsabilidad del Bicentenario y mostrar a Ayacucho a los que van a venir?
Yo como persona me siento muy orgulloso. Para mí es un honor, para mi familia, para mi promoción, para los colegas de mi colegio profesional, para la gente de mi entorno y por eso es que me sacrifico como corresponde y hemos trabajado para ubicar Ayacucho siempre en la palestra nacional e internacional. A nivel de gestión se ha logrado la ley y presupuesto por más de 156 millones para los Juegos Bolivarianos. Se está trabajando a nivel de Promovilidad con el apoyo de la Agencia Francesa de Desarrollo para el trabajo del servicio urbano multipropósito a nivel del BTR y los teleféricos que van a ser una realidad. Ya se ha lanzado la licitación internacional que va a demorar aproximadamente 10 meses.
¿Qué cosas te hubiera gustado hacer en este Bicentenario?
Enumerar la serie de proyectos y de obras que están previstas, y qué otras más faltan es hacer, de repente por carencia de presupuesto, o porque todavía no las ubicamos. Mira, hay mucho por hacer. Lo que sucede es que en los últimos años las gestiones son cortoplacistas. No trabajan en función a metas, indicadores a documentos de gestiones que marquen 10 o 20 años los planes de desarrollo concertados.
¿Se requiere reelección para la continuidad de los procesos en instituciones como la municipalidad?
Mira. Muchas veces uno se siente impotente, ante tanta necesidad de atención. Tenemos un presupuesto corto, insuficiente, y con la situación crítica nacional, estamos presupuestalmente en algunos aspectos hasta sin liquidez. El presupuesto que se dota a los gobiernos locales y regionales se ha recortado. Financieramente, presupuestalmente, estamos en una situación difícil, incluso peor que en la pandemia, pero hacemos nosotros los esfuerzos necesarios y cumplimos nuestras metas, por eso es que tenemos los incentivos y las gestiones que se ha logrado, por ejemplo, a nivel de seguridad ciudadana, últimamente con los 16 millones estamos implementando, con aproximadamente 5 millones, durante toda la gestión, pero este año sobre todo, ya hemos habilitado la logística en camionetas, chalecos antibalas, serenos y motocicletas.
Yo sé que se pueden hacer muchas cosas más, pero también trabajamos en función a lo que tenemos y a lo que vamos logrando.
¿Cómo tú ves la necesidad del trabajo con la ciudadanía? ¿Percibes que los ciudadanos se comprometen con Ayacucho o vez cierta apatía frente al Bicentenario?
Mira, la ciudadanía está un poco desconcertada con la política, está ávida de atención, pero como que le tiene poca fe al tema de la gestión pública. Pero esa aproximación es a través de los proyectos de integración en desarrollo humano. Para eso es que nosotros también estamos trabajando. A nivel de los programas presupuestales se puede recuperar esos espacios para que se identifiquen y que se sumen a esta necesidad de transformar nuestra Huamanga.
¿Cuándo uno es alcalde durante el día, está resolviendo los problemas de alcaldía y en la noche soñando cómo resolver los que vienen?
Así es, así es, pero bueno, hacemos de tripas corazón, seguimos con la vitalidad de la energía, el desprendimiento, porque consideramos que en Huamanga hay mucho por hacer.
Seguramente tendrás también algunas debilidades, pero eso se supera con un trabajo en equipo, ¿no?
Pues yo no puedo sentirme bien, solamente con halagos. Las críticas también son bienvenidas y cuando el resultado es positivo, todos festejamos. Creo que, en esa medida, el equipo está entendiendo la línea que hemos delimitado y trabajamos para eso, para la ciudadanía.
El bicentenario termina este 9 de diciembre. ¿Tiene una proyección a más años?
Mire como fecha conmemorativa, es la significación del Bicentenario que puede tener ese rótulo. Pero yo considero que Ayacucho debe de seguir cobrando la deuda histórica y debe trascender en adelante. Es más, por los 200 años no se ha tenido obras de impacto mayor. Y eso hay que reconocerlo, porque no se nos ha antecedido gestiones ni acuerdos. Y la situación crítica nacional no ha permitido que los países bolivarianos nos miren con buenos ojos. Y los países bolivarianos se han dedicado a pelearse entre ellos y no hemos tenido la atención debida.
Nosotros hemos tenido una gestión más de protocolo, de atención. Sin embargo, yo puedo rescatar algo: el tema de los bolivarianos. Te comento que vienen de 9 países, más de 2000 deportistas, se ha logrado la ley de presupuesto de más de 156 millones y yo puedo decirlo y con mucho orgullo, que la única obra que van a recordar, el Bicentenario, que ha iniciado el 2024 y la que va a terminar el 2024, en la Villa Bolivariana, que va a ser el futuro comedor y residencia para nuestra Universidad de San Cristóbal de Huamanga.
Según tenemos informaciones, sólo se va a entregar hasta el 80% de avance.
Eso es hasta el 28 de noviembre, que es la inauguración, pero por contrata este año se tiene que entregar al 100% o darle un plazo de ampliación, quizás el 2025 para que se concluya. Pero la obra queda y eso es lo más importante.
Y se viene otro evento olímpico de Ayacucho y Lima, como sedes el 2025, de los bolivarianos de la juventud, que también lo hemos solicitado. Queremos que Ayacucho sea sede de este tipo de eventos importantes.
Tenemos nosotros, dentro de 16 años, la celebración de los 500 años de la fundación de la ciudad de Huamanga. ¿Podemos empatar esos 500 años con los 200 años y, hablar del 2040?
Consideramos que esa proyección es importante, pero tiene que ser una suma de esfuerzos. Tenemos que trabajar de manera comunicativa con un proyecto concertado: gobierno municipal, gobierno regional, gobierno nacional. Solo así vamos a poder alcanzar este tipo de anhelos que tiene nuestra ciudadanía.
¿Cuáles son esos grandes problemas que no nos permiten avanzar como a usted le interesaría que avancemos?
La desidia, la apatía, la partidocracia, el disloque de nuestra democracia nacional. La corrupción institucionalizada que hace daño en cada frente de desarrollo. Pero abrigamos siempre la esperanza de que podemos, nosotros, retomar esa conciencia social y forjar un colectivo de desarrollo junto a la sociedad civil y los gestores, que son, los representantes de las entidades públicas.
Hay un mensaje de tu campaña y lo encontramos permanentemente: La identidad de Huamanga. ¿Somos ayacuchanos o somos huamanguinos? ¿¡Qué somos finalmente?
Nosotros somos ayacuchanos. Que ya es el contexto que nos representa. Huamanga es una denominación pre Bolívar. Huamanga será la denominación que atesoramos, pero que queda en la historia de la época, incluso de los próceres de la Independencia. Posterior a la Batalla de Ayacucho, somos Ayacucho. Ahora es cómo nos conocen. Huamanga es el tema del rótulo de provincia, que nos enorgullece bastante, pero es Ayacucho, como nos reconocen en todo el planeta.
Eso es lo más importante. Ambas denominaciones no colisionan en ese sentido de pertenencia, se complementan y forja nuestra identidad. Somos una ciudad cultural, con generadores de cultura producidos por nuestra Universidad San Cristóbal Huamanga, la segunda más antigua del Perú.
¿Cómo hacer para que Ayacucho se convierta en realidad en una ciudad de gestión y producción intelectual, cultural, como la UNESCO nos ha señalado?
Yo soy de San Cristóbal y uno lo siente en el corazón. Soy made in UNSCH. Soy un producto ayacuchano. He estudiado más de 12 y 13 años y 2 carreras y maestrías, casi 15 años, todo en ambas profesiones y he sido docente también. He convivido en la Universidad como 20 años. Yo amo a mi universidad, como todos acá en Ayacucho, y por eso es ese desprendimiento tal que se construya la vía bolivariana en nuestra universidad, ese es mi orgullo y el recuerdo que va a tener de la gestión.
Entonces, tenemos que aproximar la universidad con la ciudad. No podemos tener espacios separados. La universidad tiene que estar al servicio del desarrollo. Por eso rescatamos a los profesionales y muchos funcionarios que nos acompañan son graduados en San Cristóbal, son cristobalinos, ayacuchanos.
¿Cuáles serían los puntos básicos de esa unidad, para convocar a la sociedad y lograr el consenso?
El Gobierno regional también está construyendo las escuelas profesionales, entonces creo que a la fecha hay más apertura. Lo que no se veía hace mucho tiempo: San Cristóbal parecía una isla, ahora no, ahora la veo un poco más cercana. Hasta su campaña al rectorado ha sido más pública. Antes era una cuestión cerrada, pero abrigamos la esperanza de que la universidad salga de esos claustros y nos ilumine, porque para eso es que se ha creado la universidad y nos brinde esa alternativa de desarrollo y progreso.
¿Que nuestra tierra necesita una universidad que se creó por la suma pobreza de la Tierra?
Por supuesto. Es que en el en el mundo global hay universidades para la investigación, para la inversión y desarrollo, y también otras para solamente salir de la pobreza. Entonces no nos quedemos con esta última denominación. Que sea una institución sólo para el consuelo de los pobres, sino incorporarlos a la acción participativa y que sume en el desarrollo de nuestra tierra.
Finalmente. ¿Qué aspiraciones políticas tienes luego de tener esta experiencia importante como alcalde de la provincia de Huamanga?
Yo como alcalde a la fecha asumo mi trabajo, estoy concentrado en ello. Quiero mostrar resultados a la población. Dependerá de cómo en el camino estamos cumpliendo nuestros compromisos, incluso de campaña. Creo que ahí recién vamos a poder soñar con futuros proyectos. Estoy contento con el equipo, entiendo que hay situaciones todavía que superar, pero eso será otro cantar. Abrigo la esperanza de hacer una carrera política, pero la fecha todavía no está definida.
¿Es un derecho constitucional ejercer la participación política?
No soy ajeno a ello. Pero esto se va a emprender a nivel del equipo político que me acompaña.
Un mensaje para Ayacucho por el bicentenario
Celebremos juntos este Bicentenario. Si bien es conmemorativo, también hay trabajo que se viene mostrando. Pudimos haber esperado tal vez un mejor horizonte, pero es lo que nos ha tocado vivir. Una situación nacional, incluso crítica, pero su municipalidad está haciendo el trabajo. Tengan fe de que nosotros tenemos la convicción de que vamos a dejar una valla importante respecto a otras gestiones. Mi cariño sincero es nuestra Huamanga, nuestra tierra que nos ha visto nacer. Los cargos son pasajeros, pero en tanto duren vamos a ponerle todo el empeño necesario para hacer un trabajo consciente.